miércoles, 16 de diciembre de 2015

"La broma telefónica"

Era un niño que se dedicaba a hacer bromas telefónicas, un día llamando a los números que pillaba, al azar. Cuando de repente lo cogió una pobre anciana el niño dijo que la llamaban del banco y que debía 4.000 euros, a la anciana se le puso la cara blanca y se puso a decir que eso era imposible, que lo había pagado todo y que no debía nada, que era imposible, ¡que era imposible! Y el niño se empezó a reír y a reír pero la anciana no se enteraba porque estaba medio sorda y el niño seguía riéndose y riéndose y le dijo a la anciana que lo tenía que pagar mañana, la pobre mujer cuando escuchó eso le dio un infarto y el niño al ver que no se escuchaba nada se extrañó porque el teléfono no lo había colgado y se pregunto que habría pasado, entonces de repente se escuchó una ambulancia y ya se imaginó lo que había pasado y colgó el teléfono, entonces el niño se dijo a si mismo, ¿qué he hecho?¿Qué he hecho? Mientras, la pobre anciana iba en la ambulancia de camino al hospital, la ingresaron en el hospital y los médicos hacían lo que podían. Ya era de noche y el niño se fue a la cama, pero no podía dormir por lo que había hecho, no dejaba de pensar en ese silencio en el teléfono y de repente la ambulancia, no paraba de pensarlo. Al día siguiente, en el hospital ya se había terminado la operación y la pobre anciana había sobrevivido, pero el niño no lo sabía y se había pasado la noche en vela porque no dejaba de pensar lo mismo todo el rato, todo el rato pensando lo mismo, las únicas palabras que tenia en mente eran: anciana, silencio, teléfono y ambulancia. Desde ese día no volvió a hacer más bromas telefónicas.

Inventado por: Ángel García Aguilera.
Espero que os haya gustado.